Agustín de Hipona

    San Agustín ( 354 – 430 D.C. ), filósofo cristiano, considerado uno de los Padres de la Iglesia. Africano, de Tagaste, de la provincia Imperial de Numidia, hijo de un pagano y de Santa Mónica. Entre sus innumerables obras, las más destacadas, se consideran: “Confesiones”, “La ciudad de Dios”, “Los Diálogos”.
   Su postura filosófica intenta reconciliar la razón de los pensadores griegos con las creencias y enseñanzas de Cristo y sus apóstoles. Se cree estuvo profundamente influenciada por una obra de Cicerón, llamada “Hortensius”, en donde la razón alcanzaba un conocimiento de la naturaleza que culminaba en un conocimiento racional de la divinidad, como causa del orden cósmico y que procuraba una ética susceptible de alcanzar la felicidad en la unión o asimilación a lo divino.
    Su filosofía no es un sistema racional sino una estructura unida a la religión, que se descubre con una actitud del hombre que volviendo a su interioridad se eleva hacia Dios. Fe y razón no son más que medios que se exigen mutuamente para encontrar la verdad. No son excluyentes porque creer no es algo irracional ni el conocimiento racional destruye la fe. Claramente lo señala San Agustín al expresar: “Cree para comprender, comprende para creer.”
    La ética de Agustín de Hipona está expresada en su obra máxima “La ciudad de Dios”, la que fue escrita alrededor del año 412 D.C. y como respuesta a aquellos que culpaban al cristianismo de la caída de Roma en poder de los godos de Alarico. Plantea la existencia de dos mundos, uno, la ciudad terrenal, creada y fundamentada en el egoísmo de los hombres y en su suprema ley, cual es el logro d la felicidad a través de la satisfacción de los placeres humanos. La otra ciudad, la ciudad de Dios o celeste, funda su existencia en la caridad y por su intermedio el alcanzar la felicidad, en un plano sobrenatural, el cual se logra en un acercamiento a Dios. Por ende, un ciudadano de la ciudad terrenal sólo aspirará a los placeres y al gozo o satisfacción de éstos. Un ciudadano de la ciudad celeste, buscará desde su interioridad alcanzar la divinidad, a través de la búsqueda del Supremo Bien Común que es Dios y plena felicidad.
Algunas citas de Agustín de Hipona que nos pueden ayudar a entender mejor su pensamiento son:
1. “Yo creo, para entender” (“Credo ut intelligam”)
2. “No vayas fuera, entra en ti mismo: en el hombre interior habita la verdad ”.
3. “Conócete. Acéptate. Supérate”.
4. “ Si quieres conocer a una persona, no le preguntes lo que piensa sino lo que ama”.
5. “ En las cosas necesarias, la unidad; en las dudosas, la libertad; y en todas, la caridad.”


                                                   Marco Antonio Aguirre Bonilla